El WhatsApp es el sistema de mensajería instantánea más utilizado en todo el mundo, tanto con fines personales como profesionales. El mismo permite el intercambio privado de mensajes entre dos o varias personas, lo cual se hace en tiempo real.
Mediante el WhatsApp es posible intercambiar tanto textos como videos, imágenes y distintos formatos de archivo. Además, estas conversaciones son almacenadas en una copia de seguridad, la cual se mantiene en el dispositivo electrónico.
Por esto, es frecuente que las personas utilicen las conversaciones almacenadas como prueba para distintos procesos judiciales. No obstante, para que las mismas se consideren legales en un juicio, es necesario que cumplan con ciertos requisitos contemplados en la ley
El avance de las tecnologías digitales, ha llevado a que cada vez más las comunicaciones tanto personales como profesionales se realicen mediante medios electrónicos. Por tanto, ha ocurrido un cambio en la concepción de las pruebas aceptadas en distintos procesos judiciales.
En este sentido, se considera que una prueba electrónica es aquella que está contenida en un dispositivo electrónico y de la que se puede obtener información de un hecho. Asimismo, se emplea en aquellos casos que sirve como elemento probatorio en irregularidades legales.
Los mensajes de WhatsApp son consideradas pruebas electrónicas dentro del derecho español, tomándose en cuenta tanto los datos de tráfico como las conversaciones. No obstante, se debe comprobar que la información presentada no ha sido manipulada y la ha generado realmente el titular de la conversación.
En la Ley de Enjuiciamiento Civil, se contempla expresamente en el artículo 299.2, que servirán como medios de prueba aquellos que reproducen palabra, sonido o imagen. Asimismo, se tiene como antecedente la resolución de la sentencia 300/2015 emitida por la sala segunda de lo penal del Tribunal Supremo, sobre la admisión de conversaciones de mensajería instantánea.
En este sentido, las conclusiones de la sentencia han servido de base para tomar en cuenta este tipo de conversaciones como prueba en un juicio:
Tal como se puede apreciar, el uso de este tipo de pruebas es complejo, ya que se debe garantizar la autenticidad de las mismas para un juicio. Por esto, es recomendable contar con la asesoría de un profesional del derecho, como los que encontrarás en Garanley, despacho de abogados con gran experiencia y profesionalidad.
Para considerar su admisión como prueba legal en un juicio, una conversación de WhatsApp debe cumplir algunos requisitos:
Seguramente usas esta plataforma de mensajería instantánea muchas veces durante el día para comunicarte con otras personas. Sin embargo, debes ser cuidadoso con lo que manifiestas, ya que estas conversaciones sirven como pruebas legales, según las condiciones que ya te hemos mencionado.
Así, debes conocer algunos aspectos de las conversaciones de WhatsApp a considerar y poner especial cuidado en los mensajes que envías a otras personas:
De tal manera, que al comunicarte mediante el WhatsApp, te estás haciendo responsable de las opiniones que emites en cada uno de tus mensajes. Esto lleva a que puedan ser utilizados como una prueba legal en tu contra durante un juicio.
Si otra persona ha incluido un intercambio de mensajes contigo como prueba en un juicio, tienes el derecho a hacer una impugnación. Con la ayuda de un perito, se puede llegar a comprobar si la conversación ha sido manipulada de alguna manera.
Los mensajes de WhatsApp se pueden manipular a distintos niveles, que vas desde el usuario del dispositivo a trabajos realizados por especialistas. En primer lugar, la persona dueña de la cuenta tiene la posibilidad de borrar los mensajes del dispositivo, a fin de evitar que quede registro de la conversación.
Asimismo, hay diversas apps que permiten hacer cambios en los mensajes recibidos y llegan hasta a modificar la información almacenada en la base de datos del dispositivo. Por último, un técnico puede acceder por distintos medios al dispositivo y hacer cambios remotos en los registros.
Por tanto, lo primero que debes hacer es buscar a un perito autorizado para que haga el peritaje de la conversación presentada como prueba. Para esto, el mismo debe estudiar tu dispositivo y comprobar el intercambio de mensajes original y poder contrastarlo con el que presenta la otra parte.
En este sentido, recuerda que se puede manipular la conversación en un dispositivo, pero si no tiene acceso al de la otra persona, en este quedarán resguardados los datos originales. De esta manera, podrás comprobar que se ha realizado manipulación de la información y lograr que la conversación de WhatsApp no se admita como prueba legal.